A pesar de no ser la atención la única capacidad que entra en juego para poder obtener el éxito académico. Sin embargo, si es cierto que una deficiente capacidad de atención puede interferir en el propio aprendizaje, e incluso, en un rendimiento académico inferior a las posibilidades reales del alumno.
Desde una perspectiva analítica tanto de la misma como de sus causas, a fin de establecer las tareas adecuadas para elevar el nivel atencional que un alumno presenta en un momento determinado.
Deja una respuesta